26 de Febrero. – Señora Posteridad, mi amiga y dueño: La turbación de mi ánimo en estos días me ha privado del gusto de escribir a usted. Ya comprenderá que no estoy para bromas después de la que me dio la máscara de negros ojos, y que bastante ocupación han tenido mis sesos devanándose a todas las horas para desentrañar aquel arcano, sin haber logrado hasta la presente la claridad que ansío…