5 de mayo
Salgo mañana y como sólo son seis millas de camino al lugar donde nací, quiero volver a verle y recordar los días de mi infancia, que fueron como un sueño.
Quiero entrar por la misma puerta por donde salí con mi madre cuando, después de morir mi padre, abandonó esta querida y tranquila aldea para encerrarse en esa espantosa ciudad. Adiós, Guillermo; ya sabrás de mi viaje.