Vamos, no murmurar –dijo Fernando–. Se miente mucho y se dicen muchas falsedades.
–Ciertamente –añadió Alagón con punzante ironía–. Que D. Pedro Ceballos, después de ser ministro de Carlos IV y del Sr. D. Fernando VII, fue a Bayona y se vendió a Bonaparte… ¡falsedad! Que el Sr. D. Pedro Ceballos, acompañado del masón Urquijo y del inquisidor Llorente, redactó la Constitución de Bayona… ¡falsedad! Que el mismo señor firmó la circular del 8 de Julio a los agentes diplomáticos, mandándoles reconocer al rey Botellas… ¡falsedad!